2ª Parte: Reflexiones...

"Ahora lo que quiero es sacar a la luz las ideas que estos hechos me provocaron, darles forma. En principio, lo que me sugirió el debate es que el verdadero Camino de Santiago tiene que ver con la autenticidad del ser humano y con la gratuidad. Si prestamos atención a lo que nos llena como personas, son aquellas actitudes que hacen referencia a la amabilidad, el respeto, el agradecimiento, la sencillez, una cierta austeridad, la relación armoniosa con la Naturaleza, el encuentro con el que va a tu lado, el deseo de compartir, de disfrutar juntos, el sentirse unidos a un pasado propio (¡qué bonita la frase de Cicerón del libro citado de Diego Muñoz Hidalgo . “Ignorar lo sucedido antes de que tu nacieras significa que no has pasado de ser un niño”), el agradecimiento íntimo por disfrutar de la vida (Hay una frase de Diego Muñoz que mas o menos dice así "sentía los pájaros, me salían canciones")...todo esto y mucho más se vive en el Camino. Y todo ello vivido de forma gratuita, el dinero cuenta poco, en los albergues se pide un donativo y se está en ellos con lo esencial. Sería poder vivir en la práctica aquella frase de Marco Aurelio: "Acuérdate de esto siempre: para vivir felizmente basta con muy poco".

Todo esto es lo que me evocó el escuchar a los contertulios hospitaleros. Y también darme cuenta que lo importante es que haya alguien con ganas de ser así, como Resti, el hospitalero de Castrojeriz o el cura Blas de Fuenterroble de Salvatierra (Salamanca). No se trata de que nos construyan albergues bonitos a tontas y a locas para invertir en un proyecto turístico más, sino llenar de humanidad el Camino, llenarlo de gentes con los sentimientos que he dicho antes y que sepamos transmitirlos a los demás como peregrinos, hospitaleros o como simples personas que conviven con ambos. De otra forma el Camino, el espíritu del Camino, desaparecería, se convertiría en una ruta de senderismo más."

<<< *CRISTÓBAL* >>>